Muy ligera y manejable, esta flauta dulce tiene un sonido bien equilibrado en las mas de dos octavas que se consiguen con mucha facilidad. A pesar de ser un instrumento semindustrial tiene un acabado esmerado, notable calidad timbrica y respuesta facil. Está pensada para tocar el repertorio de finales del siglo XVI y primera mitad del XVII. Es un buen instrumento tanto en conjunto como de solista.